Los costes de transacción son los costes asociados que derivan de la formalización de relaciones complejas que necesariamente existen para la producción de bienes y servicios. Como ejemplo, los costes de transacción pueden ocurrir durante el proceso de negociación, búsqueda, determinación de precios, etc.
Ronald H. Coase desarrolló una teoría de la organización industrial (en especial sobre la creación de empresas), en la que los costes de transacción juegan un papel importante. En su libro “The Nature of the Firm” (Naturaleza de la Empresa) de 1937, explicaba por qué los individuos productivos encuentran beneficioso crear agencias coordinadas (empresas) como reacción a los costes de transacción. En lugar de individuos operando individualmente e incurriendo repetidamente en numerosos costes de transacción, podrían trabajar en un marco global y al mismo tiempo podrían beneficiarse, entre otras cosas, de las curvas de aprendizaje y experiencia y de las economías de escala.