Laissez-faire, laissez-passer es una expresión francesa que se traduce como “dejar hacer” o ”dejar pasar”, esto es, dejar que las cosas se desarrollen por sí mismas. En cierto sentido resume la doctrina económica de los fisiócratas, afirmando que existe un orden natural de las cosas, con sus propias leyes y es mejor dejarlas actuar por si mismas sin establecer restricciones.
El hecho de dejar que la economía funcione por si sola, en modo laissez-faire, donde la única preocupación del gobiernos es asegurar ciertos derechos de propiedad, ha sido defendido por varias doctrinas económicas como la economía neoclásica, el monetarismo, y la nueva macroeconomía clásica. El gobierno solo debería ser responsable de proveer y asegurar protección para las empresas y las personas, las fuerzas de demanda y oferta deberían ser dejadas actuar cuando los ciclos económicos lo requieran.