La economía de la información pertenece al campo de la microeconomía y analiza la importancia de la información en la economía. La teoría neoclásica se desarrolló en torno a los supuestos de información perfecta y la ausencia de incertidumbre, y aunque esta simplificación permite modelar la realidad, no es realista. La economía de la información es el resultado de una alteración en el análisis neoclásico, e integra la posibilidad de información imperfecta que dará lugar a información asimétrica.
La información asimétrica se produce en aquellas situaciones en las que un agente tiene mayor información, ya sea antes o después de que la interacción entre agentes suceda. El estudio de estas situaciones es de especial relevancia, principalmente para evitar los conflictos que surgirán de ellas. Si un agente tiene información privilegiada anterior a las relaciones económicas (asimetría ex-ante), se puede producir selección adversa. Si la información privilegiada es después de las relaciones económicas (asimetría post-ante), se considerará riesgo moral.
La importancia y el valor de la información dentro de la economía es enorme. Se elimina el riesgo y la incertidumbre, y hace que sea posible tomar mejores decisiones que reportarán mayores rendimientos. Cuanto menos riesgo e incertidumbre haya, mayor será la utilidad obtenida de los intercambios económicos.
El estudio de la economía de la información es clave para muchos campos económicos, incluyendo la teoría de juegos, teoría de la agencia, o la teoría del contrato.